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Traducción Inglés-Español: Nina
Traducción Japonés-Inglés: DayDrop

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Secretos e Iris (5)

「 Esta mañana nuestros presentadores fueron al Santuario de Nishinomiya para ver entre bastidores la carrera del Hombre Afortunado, sin embargo... Minagawa-san, ¿en qué estaba pensando? Incluso fue hasta Hyogo para la carrera. 」

「 Supongo que podría llamarse querencia¹. Mis pies se dirigieron naturalmente hacia una cara conocida. 」

「 Oh, pues sí, ese mismo miembro del personal está aquí delante de nosotros. ¿Puede la cámara tomar un plano de él? ...Y parece que está a punto de morir mientras cruza desesperadamente los brazos para decir que no, así que démosle un respiro, ¿de acuerdo? Escuchemos unas palabras de Kunieda-san, el reportero de la noticia. 」

「 Lamentamos mucho a todo el personal y a los participantes de la carrera el revuelo que hemos causado esta mañana. Prometemos que les daremos un severo sermón sobre sus acciones. 」

「 Y así mismo dice. Eso es todo lo que tenemos para el programa de esta noche. Gracias por acompañarnos en The News. Buenas noches, y nos veremos de nuevo mañana. 」

✽✽✽

"Al parecer la gente en Internet me llama el Hombre Afortunado Número 0."

"Suena como algo que diría un niño de octavo grado."

"¿Qué? ¡Yo creo que es bastante guay! Ah, sí, Nacchan, ¿no ibas a ocultar tu cara con un mosaico?"

"Intenté añadirlo, pero Shitara-san tenía razón, sólo lo hacía parecer más cuestionable, así que lo dejé. Además, ya mostraron mi cara en la transmisión en vivo— De todas formas..."

"¿Hmm?"

"No luces para nada cansado."

"Lo estaba, pero ahora estoy completamente despierto de nuevo~"

Tal vez Tatsuki había mantenido su modo especial de viaje durante todo el día porque estaba más animado que de costumbre para la emisión (incluso más). Y cuando dieron por terminada la noche, preguntó rápidamente, "¿Vas a venir, verdad?", como si la cuestión ya estuviera resuelta, y se llevó a Shin a casa. Y ahora, aquí estaban.

"Pero me siento como si fuera a caer muerto tan pronto como llegue a la cama, así que acostémonos aquí, ¿vale?"

Tatsuki tiró de Shin hacia él para que se miraran frente a frente en el sofá. Quitó sólo la ropa de la parte superior del cuerpo de Shin, acariciando el torso desnudo con las manos abiertas, y preguntó, "No te has hecho ningún moratón ni nada, ¿verdad?"

"Estoy bien. Pero dolió mucho, como si el pecho se me fuera a romper. A ti también te debió haber dolido."

"Estaba demasiado excitado en ese momento, y no recuerdo haber sentido nada."

Shin se sentó a horcajadas en el regazo de Tatsuki, y su posición ventajosa era más alta de lo habitual. Los ojos risueños y sonrientes brillaban con claridad, como si se hubieran convertido en agua y fueran a derramarse en cualquier momento. Pero sus pestañas pronto los ocultaron cuando Tatsuki dejó caer su cabeza contra el hombro de Shin.

"Ahhh... Siento que me han quitado un gran peso de encima."

"¿Te refieres a todo lo de Kunieda-san?"

"¡Sí! Quiero decir que, normalmente, él nunca haría ese tipo de favor por mí. Me alegro mucho de que Tsuzuki-san estuviera allí."

"Tsuzuki-san es bastante increíble. ¿De verdad no está enfadado contigo?"

"Me regañó una vez y lo dejó tal cual. ¿Y tú, Nacchan? ¿Sientes celos o rencor hacia Kunieda-san?"

Ahora que lo pensaba, la verdad es que no. Tampoco sentía ningún sentimiento de inferioridad, como lo bajo que había caído Tatsuki para pasar de Kunieda-san a Shin.

"No, para nada. Pero sí me pregunto cómo has podido ir a por una persona así."

"¿Qué? ¿Que es una flor en una cima, fuera de mi alcance?"

"Si te refieres a su imagen pública, sí"

"¿Qué hay de la privada?"

"...¡Algo así como Atrapar al Legendario Monstruo del Río Amazonas! ...¿supongo?"

Tatsuki abrazó a Shin con fuerza y soltó entre risas, "Dios mío, se lo voy a decir a Kunieda-san cuando lo vea mañana, en serio. Voy a decir, 'Escucha lo que mi Kitarou dice sobre ti~'"

"¡No! ¡No te atrevas a decir nada!"

"No sé si podré guardármelo para mí~ Tal vez si recibo un soborno para que me calle~"

"¿Qué? Cielos..."

Ante la petición tan evidente, Shin respondió con un beso en los labios. Mientras presionaba sus labios contra las mejillas y las orejas, y sentía los labios de Tatsuki sobre sí mismo a cambio, Shin se preguntó si a Tatsuki le gustaba la flor o el pez, pero ya no le importaba y desechó la pregunta de su mente. Mientras Tatsuki sólo mirara a Shin como lo hacía ahora, eso era todo lo que necesitaba.

"Gracias por darlo todo", dijo Shin, frotando sus manos sobre la espalda de Tatsuki con sólo una fina camiseta entre ellas. "Te quiero tanto."

"¿Esto es parte del soborno para mantenerme callado?"

"No."

Tatsuki se burló de él con esa pregunta a pesar de conocer la respuesta, así que Shin le pellizcó el lóbulo de la oreja.

"Sólo estoy diciendo lo que realmente siento."

Sus palabras encendieron por completo el interruptor de Tatsuki, y este devoró sus labios y su lengua, todo ello mientras manoseaba muy abiertamente la piel desnuda de Shin.

"Ahh... nhhh, ah"

Su cuerpo se calentó, como si las cerillas hubieran alcanzado su piel allí donde podían llegar, hasta que finalmente ardió con una única gran llamarada en lo más profundo de su vientre. Estaba seguro de que Tatsuki estaba igual por dentro.

"¡Ahhh...!"

Unos dedos apretaron un pezón y Shin arqueó la cabeza hacia atrás. Tatsuki repitió sus atenciones en el otro, pero luego atrapó los dedos de los pies de Shin y les hizo cosquillas, despertando su excitación.

"Quítate el cinturón", susurró Tatsuki. "Y el mío también."

Shin pensó que probablemente Tatsuki no tenía ganas de liberar sus manos para hacerlo él mismo. Su impaciencia era tan tierna que Shin le dio unas palmaditas en la cabeza y le dijo, "Qué bobo eres", antes de hacer lo que le pedía.

Shin se desabrochó el cinturón y abrió la parte delantera de sus vaqueros, y esta vez Tatsuki le indicó, "Bajo el cojín de allí."

"¿Eh?"

Shin se acercó a buscar bajo el cojín y encontró un tubo de lubricante. Y, por supuesto, no era allí donde normalmente lo guardaban.

"¿Cuándo llegó esto aquí...?"

"Es importante planificar y estar preparado, ¿verdad?". Tatsuki se rio mientras deslizaba sus dedos por las curvas de su espalda y su clavícula.

Hizo que Shin se avergonzara aún más de que Tatsuki pudiera ser tan inocentemente juguetón en un momento como éste. "¡Eres un tonto!", dijo, golpeando ligeramente su cabeza.

"Nnh... ahh..."

Sus pezones se habían enrojecido por la atención que las yemas de los dedos de Tatsuki les habían prestado, y este se inclinó para presionar sus labios sobre uno de ellos.

"¡No!"

Tatsuki succionó con fuerza el pezón, y Shin se dobló hacia atrás ante las punzadas de placer que le producían.

"Si vas a planificar las cosas, deberías haber apagado las luces primero."

"Creo que se necesita más planificación para mantener las luces encendidas."

"Nooo—"

Tatsuki pasó la lengua por el pequeño pezón hinchado y metió la mano impregnada de lubricante bajo la cintura aflojada de los vaqueros de Shin hacia una zona muy peligrosa.

"Aaah..."

El gel frío y espeso rozó su coxis y humedeció el pequeño agujero que se escondía más allá. Un dedo untó la humedad en la entrada y acabó enterrándose dentro. Todo su cuerpo se puso rígido por reflejo, y Shin se aferró con sus brazos a la espalda de Tatsuki. Tatsuki le dio besos en la nuca y utilizó sus dos manos para abrir a Shin. Dos dedos abrieron su agujero mientras Tatsuki introducía un dedo de su otra mano en el interior, penetrando más profundamente y deslizándose por el camino.

"Noo, ahh, ahhh... ngh, nnnh...!"

Shin arqueó la parte superior de su cuerpo de modo que sólo sobresalieran sus nalgas, deseosas y necesitadas, recibiendo todas las caricias de Tatsuki. Los mismos dedos de cada mano se turnaban para empujar y sacar, y Shin podía sentir cómo su agujero, al tragarse los objetos extraños, se ablandaba lentamente y se dilataba para acomodar algo mucho más grande. La profundidad de la penetración aún no llegaba a cierto punto en particular, pero poco a poco se fue calentando ahí.

"Nnh— Nooo, ahhh"

La sensación creciente que agarrotaba el interior de su cuerpo era dolorosa, pero en contraposición al dolor había un placer que amenazaba con estallar a través de su piel. Shin se retorció mientras enredaba los brazos alrededor del cuello de Tatsuki, escuchando un susurro en su oído.

"Tócate. Por delante."

"Nooo, no quiero..."

“Venga, por favor. Si lo haces, probablemente terminaremos más rápido. Se siente bien para ti, ¿no es así, Nacchan?"

Aquella dulce y seductora voz ronroneaba ‘Por favor’ una y otra vez en el nacimiento del pelo junto a su oreja, y aquella tentación le arrebataba más voluntad que si Tatsuki se lo hubiera exigido o coaccionado. Shin bajó lentamente la mano, liberó su ya excitado miembro de la ropa interior y empezó a tocarse.

"Nnhh..."

Sólo con sus vacilantes movimientos, desde la base hasta la punta, pudo sentir cómo su agujero en la parte trasera se apretaba con fuerza. Shin quiso huir de esta reacción instintiva suya, pero Tatsuki le animó alegremente a seguir.

"Oh, ¿ves? Estás reaccionando muy bien aquí."

"Noo, no lo hagas, tonto..."

Era vergonzoso, pero no podía parar, lo que le avergonzaba aún más. Aun así, al final, perdería ante su lujuria. Shin enterró su cara en el cuello de Tatsuki y cerró los ojos mientras se daba placer. Lo que era diferente de cuando lo hacía normalmente era un placer adicional que le llegaba desde el otro lado de su cuerpo. Los dos placeres estaban conectados por un circuito invisible. Cada vez que se acariciaba a sí mismo, y cada vez que los dedos de Tatsuki entraban y salían de él, la conexión se intensificaba, y su excitación se multiplicaba. Cuando pensó en los vergonzosos sonidos de chapoteo que provenían del lubricante, se dio cuenta de que los sonidos provenían de su propio pene, que goteaba fluido.

"Aaah... Ah, Minagawa—"

"Oh, eso es sexy. Me gusta escuchar mi nombre mientras te masturbas. Es como si me usaras como tu material de masturbación."

Su tono era suave, pero la voz de Tatsuki irradiaba una urgencia que parecía que podía abrasar el pelo de Shin.

"No creo que pueda contenerme más. ¿Está bien?" preguntó Tatsuki, buscando el acto sexual, mientras presionaba con sus dedos a Shin. Casi le hizo correrse, mientras Shin intentaba evitar su orgasmo.

Susurró, "Sí", y acarició con la nariz la frente empapada de sudor de Tatsuki. "Ven aquí."

Shin se puso brevemente de rodillas y se bajó los vaqueros y los calzoncillos al completo. Se apoyó en los hombros de Tatsuki y bajó con cuidado sus caderas.

"V-Ve despacio, ¿vale? Ahh— Aaah...."

"Lo sé... creo..."

Con su respuesta, Tatsuki capturó las caderas de Shin y las guio hacia abajo para unirse y compartir la necesidad que los invadía a cada uno.

"Aaah..."

"Oh, sí..."

Incluso las puntas de sus dedos temblaban. No era ni escalofrío ni miedo, sino una embriaguez con un ligero matiz de ambos. Cuando recibió el deseo palpitante de Tatsuki en su interior, Shin apretó los labios con un ‘Mnn’ y miró a Tatsuki. Tatsuki también miró a Shin. Se acercaron simultáneamente para darse un beso profundo y apasionado. Se morían de hambre el uno por el otro mientras se satisfacían mutuamente.

"Nnnh, nghh... Ah—"

La frustración en su vientre creció, y Shin extendió sus brazos por encima de los hombros de Tatsuki para agarrar el respaldo del sofá, y sin esperar a Tatsuki, empezó a mover las caderas.

"¡Aaahh! Ah, aah"

"Nacchan, sí, eso es increíble", dijo Tatsuki, mientras tocaba repetidamente con la yema de los dedos el lugar oculto donde estaban unidos. Shin podía sentir lo excitado que se ponía Tatsuki manoseando ese lugar, sintiendo su conexión. Cuando sintió la mirada de Tatsuki sobre él, se avergonzó de repente y rogó, "Cierra los ojos."

"Ni hablar", se negó Tatsuki. "Es una buena vista."

"No puedes, nooo, aaaahh..."

Sus rodillas subían y bajaban en el asiento del sofá, el muelle era ligeramente diferente al de la cama. Shin estaba tan aturdido, que sentía que su cuerpo iba a salir despedido del sofá así, hacia algún lugar que no conocía.

"¡Nnn— Nooo!"

Se sentía bien, pero Shin estaba demasiado desacostumbrado a esto, así que aunque quería correrse, no podía. Tatsuki rodeó con su mano el pene de Shin mientras este se encontraba en este estado de combustión incompleta.

"Ahhh... Noo..."

Shin se vio atrapado en un espeso deseo entre su frente y su parte trasera, y las chispas brotaron de detrás de sus ojos. Sólo veía blanco, como si no existieran otros colores.

"No, no puedo, Minagawa, me voy a correr."

"Vale. ¿Así?"

"¡Aaaahhh...!"

Tatsuki sincronizó la intensa penetración de su pene con el giro de sus dedos en la punta del miembro de Shin. Shin apretujó a Tatsuki, reaccionando a su propio placer, y se corrió.

"Nhhh..."

Shin se desplomó contra el pecho que tenía enfrente, y Tatsuki le reconfortó con palmaditas en la espalda.

"Gracias por tu esfuerzo."

No obstante, había una dura erección que seguía en el interior de Shin.

"Y ahora es mi turno."

"¿Eh? —¡Ahh!"

Tatsuki levantó con fuerza las piernas sobre las que Shin se había desplomado, doblando las rodillas en el aire.

"No, nooo."

Cambió la profundidad y el ángulo del pene de Tatsuki en su interior, y la postura los empujó más profundamente y más cerca, e hizo que su agujero jadeara obscenamente. Tatsuki abrazó a Shin y lo empujó hacia arriba, y por un momento no pudo ni pensar en la ropa a medio quitar que se amontonaba y le molestaba. Sólo pudo aferrarse a Tatsuki, gimiendo bajo su merced.

"Aaaah... aaahh, ah..."

Shin se dejó penetrar, abierto, convertido en un pudín. El líquido preseminal de Tatsuki bañaba sus entrañas, y los ruidos obscenos, junto con sus voces, atormentaban sus oídos.

"Ah, aaah— No, voy a..."

"Yo también... No puedo aguantar más..."

"Ah— Aaah..."

Buscando su clímax, Tatsuki embistió a Shin sin piedad. Cada una de sus penetraciones hizo que Shin se elevase.

"Noo, ahh, aaah, ngh"

"Nnh, Nacchan, te quiero", dijo Tatsuki, yendo más y más profundo, y acariciando su deseo. "En serio, eres el único para mí para siempre".

"Nn..."

¿Era Shin el que se abría y desnudaba? ¿O era Shin el que estaba incitando, atrayendo más a Tatsuki? Sus intercambios de pasiones se mezclaron para crear un vórtice, y Shin incluso olvidó que existía un límite entre sus dos cuerpos, y en ese momento, Tatsuki llegó al clímax. Shin tuvo un espasmo en el abdomen al sentir que se corría, como si algo hubiera estallado en algún lugar que no fuera su pene.

"¡Ah, aaah... ngh!"

"Ngh... Ahh—..."

Tras un breve silencio, el sonido de una respiración agitada llenó la estancia. Tatsuki apoyó su barbilla en el hombro de Shin, dijo "Eso se sintió tan bien", y luego se rio como si hubiera recordado algo.

"¿Qué?"

"Estaba pensando que estamos en la misma posición que esta mañana cuando terminé la carrera~"

"¡No digas eso!"

Tomaron una ducha y finalmente se acostaron en la cama por primera vez en dos días, y Shin sintió que iba a caer dormido en el acto. Pero no quería que su corto viaje terminara todavía, así que se obligó a hablar.

"Así que tu fortuna resultó ser cierta."

"Los dioses pueden hacer cosas buenas a veces."

"¿Por qué actúas con tanta arrogancia?"

"Aunque no participe en la carrera del Hombre Afortunado el año que viene, me gustaría volver y sacar otra fortuna allí. Tengo curiosidad por saber qué me tocará la próxima vez."

Si sólo fueran a dar un paseo, entonces Shin podría hacer eso con él.

"Pero el año nuevo apenas ha comenzado."

"Oh, tienes razón."

Era realmente un comienzo de año agitado, y sus miedos y preocupaciones serían interminables, pero probablemente las cosas saldrían bien sin importar los obstáculos que se les presentaran, pensó Shin mientras bajaba suavemente los párpados de Tatsuki que se abrían y cerraban. Su oración, para que Tatsuki regresara a él sano y salvo, había llegado a los dioses.

Y así estaba bien. Su deseo se haría realidad.

 

Notas