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Traducción Novela: Brenda

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Kei no tuvo noticias de Ushio desde ese día, probablemente estaba de viaje en este momento. Kei repitió la última parte de su pelea en su cabeza una y otra vez, y cada vez se volvía loco. Pero debido a que sería una gran humillación para Kei que alguien notara su angustia, hizo un esfuerzo extra para jugar su encanto mientras ayudaba a Tatsuki con sus compras. Tomó la iniciativa de recomendar elementos para que Tatsuki se los probara y le dio consejos sobre lo que funcionó y lo que no funcionó, todo porque Kei quería que terminara lo antes posible. Al final, pudieron mirar rápidamente a través de los grandes almacenes y elegir un traje nuevo, camisas de vestir y corbatas para Tatsuki.

"Muchas gracias por tu ayuda. En serio me salvaste.”

“Había muchos artículos bonitos que te quedaban bien. También me alegro de haber podido ayudar."

Las palabras huecas de alabanza dejaron un sabor amargo en la boca de Kei. Se sintió tan terrible como cuando usó accidentalmente su limpiador de cara para cepillarse los dientes en lugar de la pasta de dientes.

"Kunieda-san, almorcemos juntos en alguna parte. Quiero agradecerle por ayudarme, así que será un placer."

“Gracias, pero todos los restaurantes están llenos a esta hora del día. Prefiero comer en la cafetería.”

Ya atraigo suficiente atención como es. No quiero retrasarme aún más llevándote a ti y a tu ruidosa bocaza.

"Supongo que tienes razón", dijo Tatsuki, rindiéndose sorprendentemente fácil. Se dirigieron hacia la estación de tren. Mientras cruzaban un puente peatonal, una voz gritó frente a ellos.

"¿Minagawa-kun?"

Maldición, ¿eso es un espectador? Debería haber ofrecido pagar un taxi.

Sin embargo, Tatsuki respondió a la dama con un sorprendente "oh, hola, ha pasado un tiempo". Parecía una dama normal de mediana edad, no alguien de la industria de noticias de televisión. ¿Tal vez ella era una pariente o la madre de un amigo que él conocía?

"No te he visto por aquí últimamente."

"Sí, he estado muy ocupado desde que entré en el programa."

“Lo veo todas las noches. ¡Es increíble que estés en el mismo programa que Asou-san! Oh, ¿esta persona aquí sería Kunieda-san?”

Irritó a Kei el ser tratado como una ocurrencia tardía, pero él sonrió cortésmente y dijo: "hola."

"¡Está bien! ¡Me ha ayudado mucho en el trabajo!"

"Pero eso es parte de tu encanto, Minagawa-kun. La gente, naturalmente, quiere ayudarte, estés donde estés.”

“Oh, ¿eso crees? ¡Me alegra oír eso!”

¿No hay un concepto de humildad en ese cerebro tuyo?

"¡Cuídate! ¡Buena suerte!” La mujer palmeó ligeramente a Tatsuki en el hombro y siguió su camino.

Kei preguntó: "¿es alguien a quien conoces?" No le importaba especialmente, pero era el curso de acción natural en esta situación particular.

"No, no la conozco en absoluto."

"¿Huh?"

"Bueno, es más como ... um, ella es alguien que me habló cuando solía venir aquí todo el tiempo."

"¿Solías venir aquí?"

"Sí."

¿Qué hiciste, vendiste postales con estúpidos mensajes inspiradores? actuar o tocar en la calle, cantando canciones ridículas?

“Por aquí.” Tatsuki saludó a Kei desde al lado de la barandilla del puente peatonal. Podían ver una gran intersección con peatones cruzando debajo de ellos.

“Solía estar aquí usando a las personas para practicar “jugada a jugada”. Por ejemplo, cuando la luz se pone verde, nos vamos a las carreras. El hombre de la chaqueta de cuero negro está a la cabeza, oh, fue capaz de escapar del grupo de hombres de negocios de mediana edad ... Algo así. Pero siempre estaba parado allí, mirando hacia abajo y murmurando para mí mismo, así que la señora se acercó a mí preocupada de que pudiera intentar suicidarme."

"Entonces ..." Kei se sorprendió, y su voz mostró cierta vacilación. "¿...Has estado practicando esto por mucho?"

“Sí, por casualidad me convertí en locutor, pero pensé mucho en lo que quería hacer. Me gustan bastante los deportes, así que decidí que, mientras lo hacía, debería tratar de convertirme en un locutor que pueda narrar “jugada a jugada”.” Tatsuki inclinó la cabeza sobre la barandilla y sonrió casi nostálgicamente a la multitud de personas. debajo de él. “Cada vez que tenía tiempo libre, venía aquí. Y los fines de semana, iba a las carreras de caballos, el estadio de béisbol, el estadio de fútbol, donde podía ir practicaba mi “jugada a jugada”, luego me iba a casa y comparaba lo que hacía con los juegos en la televisión o la radio. Creo que fue en julio cuando recibí la noticia de que finalmente debutaría como locutor en el otoño. Estaba muy emocionado. Pero luego, por alguna razón, me cambiaron a The News. Al principio no quería aceptar el trabajo y les dije que no tenía sentido ponerme allí. Mi representante dijo que era una gran promoción y una oportunidad increíble para mí, pero no lo vi así."

Kei recordó que Shitara mencionó que Tatsuki se había quejado por haber tomado el trabajo. Entonces esta fue la razón.

Tatsuki se llevó la mano a la nariz y susurró: "huele a metal". Se había aferrado a la parte oxidada de la barandilla.

¿Qué eres, un niño? Ja, ¿necesito preguntar?

Tatsuki era 180° lo opuesto de Kei; Tatsuki llevaba su corazón en la manga para que todos lo vieran.

"Siento escuchar eso."

"Pero está bien ahora, creo que las cosas salen mejor. Realmente disfruto mi trabajo y puedo aprender muchas cosas. Además, nos conocemos mejor, Kunieda-san.”

Uh, no, no lo hacemos.

"Mientras te estés divirtiendo, eso es lo importante". Kei respondió solo a la parte que no tenía que ver consigo mismo, pero ahora tenía sentimientos encontrados acerca de cómo había manejado su ira hacia Tatsuki.

Kei deseaba que Tatsuki pudiera haber seguido siendo el estúpido idiota, pero inteligente, que creía que era. No quería saber sobre él más allá de eso.

...Nunca se sabe, podría estar trabajando desesperadamente detrás de escena cuando no está en el trabajo. Hay aspectos de las personas que no siempre ves.

Era justo como Ushio había dicho.

"Kunieda-san, pongámonos en marcha."

"Oh, tienes razón. Lo siento, estaba un poco embobado."

"Por cierto, durante mi entrevista, no estaba tratando de ser gracioso."

"¿Huh?"

Kei vio a Tatsuki luciendo serio por primera vez fuera de sus transmisiones de televisión. La amabilidad de sus ojos redondos, como los de un cachorro, se transformó cuando frunció el ceño, luciendo inesperadamente determinado y sin miedo.

“Realmente me sorprendió mucho el momento en que entré en la habitación. No era como si nunca hubiera visto ninguna celebridad, pero realmente tenías una presencia abrumadora sobre ti. Como si tu trabajo fuera para que la gente te mirara y supieras cómo manipularlo. Fue increíble para mí."

"Realmente piensas demasiado bien de mí."

Kei trató de descartar las palabras de Tatsuki con la frase que solía usar para difundir elogios excesivamente exagerados, pero Tatsuki se concentró en la mirada desviada de Kei como un sabueso bien entrenado. Era por eso que Kei siempre se sentía incómodo con Tatsuki, como si nunca pudiera bajar la guardia.

"…¿Estás bien?"

"¿Huh?"

"Sólo que no te pareces a ti mismo hoy, es como si te estuvieras presionando demasiado. Bueno, pero supongo que no tenías más remedio que venir conmigo hoy.”

"…Oh, estoy bien."

Estoy poniendo el 120% en esta sonrisa, ¿por qué no funciona?

No poder producir el efecto que quería con su imagen fue un golpe fatal para Kei. Decidió echarle la culpa a Ushio. Todo es culpa tuya, se quejó para sí mismo, pero al final, reunió toda su gracia y dijo: "gracias por tu preocupación".

Cuando regresaron al departamento de locutores, varias personas les preguntaron si Tatsuki pudo gastar su asignación de ropa.

¿De qué está hecho, miel? ¿Y todos son Winnie Pooh? No es como si fueran ancianos viviendo en el campo, hambrientos de noticias y emoción. ¿Por qué todos siguen acudiendo a él?

"¡Sí, tengo mucha ropa bonita!"

"¡Oh, quiero ver!"

"Estoy ajustando las longitudes, pero debería poder recogerse todos mañana".

“Si ibas a comprar un traje, deberías haberme llevado conmigo. No necesitabas molestar a Kunieda-kun con eso.”

Así es, maldita sea.

Kei se escapó casualmente del área, pero sus oídos se animaron en la siguiente parte de la conversación.

“De ninguna manera, sólo te quejabas de lo celoso que puede llegar a ser tu novio. No quiero que me apuñalen por pasar tiempo contigo, ya sabes."

¿Celoso? Ahora eso suena familiar. Pasar tiempo juntos ...

… Aunque nunca has salido a pasar tiempo conmigo.

Kei casi dejó escapar un jadeo al darse cuenta, y se apresuró a salir por la escalera de emergencia. Esas fueron las palabras de despedida de Ushio de su pelea. Kei no estaba pensando bien en ese momento; estaba más indignado por el intercambio que tuvieron antes en la pelea, pero ahora que lo pensaba, probablemente eran los celos hablando.

Kei no pensó que nunca habían salido juntos, pero después de movilizar su memoria sobresaliente y ponerla a trabajar, realmente no pudo encontrar una sola vez en los seis meses que habían estado juntos. Durante la semana, lo máximo que podía hacer era llegar tarde, dormir y luego volver a casa. Los fines de semana, ellos ... mayormente dormían un poco más. Pero, Ushio no se había quejado, y Kei nunca se dio cuenta de que no estaba contento con eso.

¿Por qué no dijo algo? No quiero salir vestido como Kunieda Kei, pero hubiera estado bien yendo a un barrio izakaya. No soy un completo monstruo.

Así es, no soy un monstruo, por eso me molestó. Pensé que nunca tuvo problemas para decirme cosas sin rodeos, pero se negó a decir nada hasta que se le ocurrió de esa manera. ¿Estaba haciéndolo por consideración a mí y lo agotado que me pongo de actuar todo el tiempo? ¿Lo he estado haciendo sentir que necesita contenerse por mí?

Sin embargo, a pesar de sus serias preocupaciones sobre Ushio, sintió una leve dulzura por la palabra "celos", que lo venció, que desvaneció todo en el fondo. Su mal humor y angustia fueron completamente barridos. Si no luchara por reprimirlo, una sonrisa amenazaría con aparecer en su rostro.

Él está celoso. Por mí. Se molestó por un poco de celos. Que idiota. Si hubiera dicho algo, me habría comprometido y lo habría encontrado a medio camino. Ahhh, estoy tratando de dejar de sonreír.

Kei se frotó las mejillas como si estuvieran hechas de arcilla e hizo todo lo posible para darle forma a su rostro al Kunieda Kei normal. Sería un día largo, pero tenía algo que esperar al final.

Cuando Kei salió al pasillo, se topó con Tatsuki.

"¡Ah!", exclamó Tatsuki mientras miraba la cara de Kei, casi haciendo que Kei se congelara por miedo a no haber podido arreglar su expresión. "Me alegra que te veas mejor que antes."

Maldición, ¿qué demonios eres?

Kei entró en la casa vacía de Ushio. Estaba esperando su venganza. Estaba tan animado que no sintió el frío de la casa en absoluto. La cama no estaba hecha con las sábanas desparramadas como si el dueño se hubiera ido apresuradamente, y la camiseta que había usado para dormir se dejó en un montón arrugado. Estaba a punto el comienzo del invierno y, sin embargo, Ushio aún insistía en usar mangas cortas: por la noche molestaba a Kei y se acurrucaba contra él para sentir calor ...

¡No, no, no me puedo distraer ahora!

Kei se metió en la cama y rodó sobre la ropa. Luego llamó al celular de Ushio. No le importaba la diferencia horaria, lo dejaría sonar hasta que Ushio contestara.

"¿Hola?"

La voz de Ushio no tenía ningún rastro de vacilación.

Que idiota.

Kei respondió con aire de suficiencia, "si te vas a poner celoso, hazlo de una manera más linda."

¿Cómo estuvo eso? ¿Cómo te gusta que te molesten al recibir tus propias palabras en tu contra? ¿Ahora qué vas a hacer? ¿Juegas, tonto? ¿ Vas a enojarte y negarlo? ¿Quizá algo fuera de lugar, como avergonzarse? ... Maldición, pero no puedo ver su reacción por teléfono.

Sin embargo, Kei solo escuchó un plano "ya veo" desde el otro extremo del teléfono. “Entonces finalmente lo descubriste. ¿Cuán estúpido puedes ser?

"¿Huh?"

"Y también te apuraste a decírmelo con orgullo por teléfono ... Eres un idiota. Lo sabía, pero eres realmente un idiota.”

El plan de Kei para humillar a Ushio de alguna manera se volvió de cabeza, y ahora estaba estupefacto.

Uh, debería haber tenido la ventaja aquí, entonces, ¿cómo me dieron la vuelta?

"Pero supongo que te perdonaré ya que en realidad tomaste la iniciativa de llamarme."

"¿¡Qué!?" La mente de Kei quedó en blanco cuando la sangre corrió a su cabeza en un instante, su voz temblando de ira. "¡Tienes que estar bromeando! ¡No necesito tu perdón! Sólo estaba..."

"Lo sé, lo sé. Una vez que te diste cuenta de que estaba celoso por tu culpa, estabas tan feliz que tenías que llamar y contarme al respecto."

"¡¡Te equivocas!!"

En su angustia, Kei rodó de un extremo a otro de la cama y resolvió colgar, y finalizar la llamada. Estaba a punto de quitarse el teléfono de la oreja, pero con un tiempo impecable, escuchó a Ushio decir: "no cuelgues."

"Probablemente tengas cámaras ocultas configuradas, ¿no?"

"¿Huh? Oh, estás en mi casa? Olvidé el jamón en el refrigerador. Tíralo por mí, ¿vale?”

"¿¡Y a mi que me importa!?"

"Vamos, cálmate y hablemos."

"Cargos extra a los celulares."

"Pagaré, pagaré."

"... ¿Lo prometes?"

"Sí, sí."

El tono de la voz de Ushio hizo evidente que entendía que a Kei realmente no le importaban los cargos del celular. Kei sintió que podía imaginar claramente la sonrisa de Ushio, coqueteando y bromeando, justo en frente de sus ojos. Realmente odiaba admitirlo, pero lo ponía triste y se sentía solo sin esa sonrisa dirigida a él. Fue un poco mortificante.

"¿Cómo has estado?", preguntó Ushio.

"Sólo han pasado dos días."

"Entonces me has extrañado?"

"Oye, ¿escuchaste una sola palabra de lo que dije?"

"Pero te extrañé."

Es fácil para ti decirlo. A pesar de que te fuiste tranquilamente en un viaje que no era estrictamente por trabajo. Cuando somos sólo nosotros dos, el mundo se paraliza, pero sé que hay muchas personas a tu alrededor que te apoyan. Una vez pensé que no necesitaba a nadie a mi lado, pero ahora te tengo a ti. Y ahora que te necesito a mi lado, será mejor que sientas esa carga y te responsabilices de ella, estúpido.

Pero Ushio probablemente no se lo tomó en serio, por eso pudo decir algo así.

"Estás mintiendo", dijo Kei.

"No estoy mintiendo."

A Kei le irritaba que se sintiera aliviado por la sensación de impotencia en las palabras de Ushio.

"¿Todavía estás de mal humor?", preguntó Ushio.

"No estoy de mal humor."

"Entonces, ¿qué tal si hacemos las paces entre nosotros?"

"¿Qué diablos significa eso?"

"¿Qué ropa tienes puesta ahora mismo?"

"¿Huh?"

Llevaba lo que normalmente usaba en privado. Ushio lo sabía. Aunque Kei tenía un par de atuendos que rotaba entre lavados, sólo usaba sudaderas y pantalones de chándal en la casa. No había necesidad de preguntar siquiera.

"¿Qué estoy vistiendo? Lo normal."

"Lo supuse."

"¡Entonces no preguntes!"

"No te enojes ... Bien, entonces, ¿dónde estás?"

“¡Tu casa ya lo sabías! ¿Estás sufriendo de jet lag? Te dejaré entonces."

"No te vayas", dijo Ushio, pero no había contundencia en su tono. Hubo un silencioso "Dios, eres denso", que siguió, y Kei no dejó de escucharlo.

"Oye."

“¿Estás arriba? ¿En mi cama? Lo más probable."

"Ugh, vamos..."

Kei estaba a punto de decir: deja de hacerme preguntas estúpidas para las que ya sabes las respuestas, pero fue interrumpido por un comando extraño.

"Tócalo."

"¿Huh?"

Kei miró alrededor de la cama e incluso intentó poner su mano contra la pared. ¿Ushio plantó una sorpresa en algún lugar de la habitación? Pero nada pasó. Intentó tocar el suelo y el marco de la cama, el mismo resultado. Kei se preguntó si había dicho algo que no debería haber dicho, y Ushio sólo estaba diciendo algo que le respondiera. Se enojó un poco y gruñó: "¿tocar qué?", pero Ushio solo suspiró.

"... Eres realmente tonto."

"¡Y sigues diciendo cosas que no tienen sentido!"

"Te estoy diciendo que toques algo que tocaría si estuviera justo a tu lado."

"... ¿Eh?"

Kei finalmente lo entendió. "Hacer las paces entre sí" por teléfono.

"¡¡Estúpido!" Kei sintió que toda la sangre en su cuerpo se concentraba en la parte posterior de su cabeza. Casi le preocupaba que la pantalla LCD junto al oído se derritiera.

"¿¡Por que eres tan estúpido!?"

"Ya me llamaste así una vez."

"¡Estúpido! ¡Eres realmente estúpido! ¡Uf, eres un pervertido!"

"¿Por qué?" Ushio respondió con calma. "Si hubiera querido hacerlo por teléfono a pesar de que estábamos juntos, podría ser un poco pervertido, pero dado que estamos físicamente separados en este momento, es perfectamente normal."

Se lo había dicho tan descaradamente que Kei casi pronunció: puede que tengas razón, pero se sacudió del humo y los espejos.

"¡No, no es! De todos modos, estás en la casa de otra persona ..."

"Soy el único arriba ahora mismo. Estaré bien, no gimo tan fuerte como tú."

"¡No gimo tan fuerte!"

Y de quién es la culpa, ¿eh? Mi cara y mi voz son mi medio de vida y, sin embargo, cuando tengo trabajo al día siguiente, nunca te rindes y nunca te detienes ... Mierda, mierda, mierda.

Deja de pensar en eso.

"Hola ...", el l tono de Ushio era tranquilo, pero Kei sabía que Ushio se lo estaba poniendo para aprovechar su debilidad. "Si realmente no quieres, puedes colgar. No puedo empujarte por teléfono después de todo."

Ushio tenía razón. Kei se preguntó por qué no acababa de colgar. Incluso cuando se lo señalaron, Kei no podía mover la mano que agarraba su teléfono celular. Sólo podía respirar, observando su aliento empañarse sobre la pantalla del teléfono, el color apagado, blanco lechoso nublando su cerebro. Se preguntó con asombro cómo su aliento podría cruzar todo el océano, llegando hasta el oído de Ushio. Fue realmente una maravilla.

"Tócate." Esta vez el tono de la voz de Ushio fue completamente diferente.

"…¿Dónde?"

Kei se dio cuenta de que el tono confundido en su voz sonaba estúpido, pero parecía alegrarle escucharlo. Él respondió: "en cualquier lugar", y parecía que estaba sonriendo mientras lo decía. "Donde quieras que te toquen o donde creas que te tocaría."

"No lo sé."

"¿Qué? ¿Quieres que te explique todo explícitamente?” Ushio respiró hondo y ronco. "Sucia cosita". Su voz estaba llena de una dulzura pegajosa generalmente reservada para el dormitorio. Kei encontró su lengua y su cabeza deteniéndose, pegándose en su lugar como si hubiera sido bañados con melaza.

Ushio dijo: "también me da vergüenza".

Kei nunca escuchó nada más descarado.

"Mentiroso."

"No tanto como tú."

"Cállate…"

La respiración de Ushio vibró sobre hilos invisibles de ondas electromagnéticas. Kei puso la llamada en el altavoz y colocó su teléfono celular sobre la almohada frente a él mientras se recostaba en la cama frente a la pared. Su mano derecha se deslizó dentro de sus pantalones de chándal, rozándose tentativamente sobre su ropa interior. Hacía más calor allí de lo que se había dado cuenta.

"¿Te estás tocando?" La voz de Ushio le dio otro golpe, incitándolo aún más.

"T-Tú ..."

"¿Hmmm?"

"Quieres hacer esto ... así que sólo lo estoy haciendo ... por ti ... ngh ... no me gusta esto ... en absoluto ..."

"Así es." Sólo en momentos como estos Ushio cedió y acordó con Kei tan fácilmente. "Todo es mi culpa. Soy el único que te escuchará, así que relájate y disfruta."

Era como si estuviera siendo empujado a la tentación. O en realidad, tal vez era como si lo estuvieran atrayendo. En cualquier caso, los susurros de Ushio lo sedujeron, y Kei movió los dedos directamente sobre su polla, reaccionando ante el hombre que imaginó que estaba a su lado.

"Mmmm ..."

Kei se dio cuenta de que había pasado mucho tiempo desde que se había complacido. Ahora que su cuerpo era explotado regularmente por cierta persona, nunca sintió la necesidad de buscar ninguna otra liberación. Era extraño perder la sensación de su propia mano. A pesar de que había pasado mucho tiempo; aun así, sabía dónde estaban todos sus puntos sensibles.

"Nghhh ..."

"¿Dónde te tocas?"

"No te lo diré…"

"De acuerdo, déjame escuchar más de tu voz."

"¿Qué quieres decir con "¿de acuerdo?" Kei estaba procediendo con su ruta habitual, con el tiempo habitual para alcanzar su objetivo, pero apenas podía distinguir su propia voz. "No me ordenes."

"Hmmm ..."

Kei podía imaginar a Ushio inclinando la cabeza hacia un lado pensando. No era como si Kei quisiera continuar con esto, pero si Ushio respondía, entonces no importaba, iba a explotar. Pero la voz que ronroneó hacia él cayó tan baja y tan áspera, que Kei sintió que estaba alucinando la sensación de la lengua de un gato lamiendo sus tímpanos.

"Kei."

Kei debería haber estado acostumbrado a escuchar su nombre durante las relaciones sexuales, pero sonaba diferente por teléfono, como si un hombre que no fuera Ushio lo llamara por su nombre.

“Tómalo con tu mano y acarícialo lentamente. No uses tu meñique o tu dedo anular."

"…¿Qué?"

"Simplemente hazlo."

"... No quiero."

"Estás mintiendo de nuevo. Usa sólo los tres dedos para acariciarte, y cuando te pongas duro, enfoca tus dedos en la punta. Te gusta, ¿no? "

"Dije que no quiero..."

"Sé que te gusta cuando te aprietas justo en la punta y uso mi pulgar para jugar con la hendidura allí. No puedes dejar de gemir y gotear."

"No…"

Kei no quería escuchar esto. Pero no importa cuán fuerte sacudió la cabeza, su mano no detuvo la corriente de palabras sucias que se derramaban sobre el teléfono.”

"... Kei." Fue vencido por la venenosa sensualidad en la voz de Ushio. "Hazlo. Quiero tocarme al sonido de tu voz gimiendo por lo bien que te sientes.”

Junto con la leve vacilación en la voz de Ushio, se escucharon sonidos de tintineo en el fondo. Probablemente se estaba quitando el cinturón. Al pensar en Ushio acostado para tocarse también, la excitación recorrió el cuerpo de Kei como una llama que había encontrado una fuente de oxígeno.

"... Ah, ahhhh ..."

"Sí, así. Sabía que podrías hacerlo."

Kei siguió las instrucciones de Ushio, acariciando su polla hasta el tope mientras imaginaba vívidamente el fantasma del toque de Ushio, la longitud de los dedos de Ushio, subiendo y bajando por su eje. Kei podía sentir la marcada disparidad entre su propia mano y la de Ushio haciéndolo de esta manera.

"Mmhhh ... Mmm, ahh ..."

“Asegúrate de mantener el ritmo. Siempre eres tan codicioso, que quieres venirte tan pronto como puedas."

"Eso es porque ... todo es tu culpa ... ngh ..."

"No lo es", respiró Ushio, teñido con media sonrisa y media excitación. "Es porque tu cara, tu voz y tu cuerpo son tan lascivos que no puedo evitar querer hacerte todo tipo de cosas."

"Idiota ... ngh ..."

Entre sus insultos, Kei nunca soltó su mano, siguiendo fielmente los movimientos de las caricias de Ushio que habían sido grabadas en su cuerpo. El fluido de la punta de su polla goteó por toda su longitud, empapándolo en un placer suave y resbaladizo. Kei no tuvo que mirar para saber que el fluido transparente adquirió lentamente una calidad lechosa y turbia mientras corría entre sus dedos.

"No, ahhh, ahhh ..."

"Estoy realmente impresionado por los celulares en estos días. Incluso puedo escuchar los sonidos de tus dedos mojados mientras se mueven.”

"No…"

"¿Quieres tocarte los pezones?"

Fue formulado como una pregunta en lugar de una orden. Probablemente porque Ushio sabía que Kei seguiría obedientemente cualquier tipo de sugerencia que haría en este momento.

Kei hizo una mueca por el peso de su polla hinchada de sangre cuando preguntó: "hch ... ¿unh ...?"

"¿Qué?"

"¿Cuál ... cuál ...?" La oreja que estaba presionada contra la almohada palpitaba con calor.

"Joder ..." Ushio se echó a reír con una odiosa ligereza. “Me vine un poco justo ahora. Eres realmente demasiado lindo ... Cualquiera de los dos está bien, el que quieras"

Kei buscó debajo de su camisa para encontrar un pequeño brote alegre, sorprendiéndole la rapidez con que se puso duro. El placer se extendía en todas las direcciones, como gotas de pintura que gotean sobre la superficie del agua.

"Ahh, nnghh ..."

"¿Cuál estás tocando?"

"El de la izquierda."

“Oh, ¿te gusta más? No lo sabía. Lo recordaré de ahora en adelante."

Era simplemente que su mano izquierda estaba libre, pero en lugar de explicar la razón, Kei estaba demasiado ocupado complaciéndose mientras bromeaba y jugaba con su pezón hinchado.

"Ahhh, aaahhhh ..."

"¿Cómo está?"

"Ah, se puso duro ... ngh ..."

"Qué lindo, desearía poder tocarlo también."

"Mnnhh ..."

La pequeña protuberancia (pero inconfundible) evocó una excitación que surgió hacia su abdomen, haciendo que la mano que estaba frotando su polla trabajara aún más duro.

"Aahhh, nhhh, ahhhh..."

"Kei, ¿se siente bien?"

"Se siente bien, mnnh ..."

"¿Quieres tocarte por detrás?"

"No, no quiero".

"¿Por qué no?"

"No me gusta a menos que seas tú quien me toque allí ..."

"... Joder, casi haces que me corra de nuevo".

Kei definitivamente escuchó el aliento de Ushio por un momento, por lo que no pensó que estaba mintiendo.

"Ah, ah, no puedo ... nunca más ... nghh ..."

Presemen se escapó de su polla, gruesa y viscosa, a un ritmo casi alarmante, y envió descargas de placer que le recorrieron la espalda. La vieja camiseta arrugada de Ushio estaba justo en frente de los ojos de Kei, y enterró su rostro en ella. Olía al aroma de Ushio.

"¿Quieres unirte?"

"Sí…"

"Frótate todo lo que quieras."

"Ahhh! Ah! Ah! ¡Ushio ...!”

Kei persiguió su lujuria mientras frotaba círculos con las yemas de sus dedos, una fricción desesperada asaltaba su polla y su pezón. Los únicos sonidos que resonaban en su oído eran el latir acelerado de su corazón y las respiraciones jadeantes que escapaban de la garganta de Ushio.

"¡Kei ...!"

"... ¡Ah!"

Kei se acurrucó sobre sí mismo mientras su cuerpo se convulsionaba, ensuciando su mano y su ropa interior con la prueba de su excitación.

"Ah ..."

"¿Te corriste?"

"Sí…"

A medida que la respiración de Kei se reajustó a la normalidad y volvió a sus sentidos, tomó todo lo que Kei pudo reunir para emitir un brusco "debería colgar".

"Hagámoslo de nuevo alguna vez."

“¡Y un infierno que lo haré! ¡Envíame un mensaje de texto si necesitas hablar! ¡No te atrevas a desaparecerte de mí!"

Kei había dicho su parte, y sin esperar una respuesta, terminó la llamada. Se enjuagó en la ducha y, cuando regresó, encontró un mensaje de texto de Ushio.

Decía: "¿de qué color es tu ropa interior?"

"¡Uf, muérete!" , gritó Kei mientras arrojaba su celular sobre una almohada

.

Kei recibió un mensaje de texto de Ushio que decía que volvería en aproximadamente una semana.

¿Qué pasa con él? Sólo han pasado un par de días, pero me ha estado enviando mensajes de texto con tanta ansia.

Kei se levantó de su asiento en el departamento de locutores pensando que debería mudarse a un lugar más privado y se dirigió hacia la sala de control de producción utilizada para The News. Los monitores oscuros cubrían la pared en un patrón de cuadrícula que se asemejaba a una barra de chocolate (cada uno con un uso diferente y específico), y las sillas que generalmente estaban ocupadas por el personal estaban cuidadosamente escondidas. El aire acondicionado normalmente estaba configurado para mantener la habitación en pleno funcionamiento, y con la habitación vacía y todo apagado, hacía bastante frío adentro. Kei se estremeció y sacó su teléfono celular.

"Hola", respondió Ushio cuando levantó el teléfono. "¿Que pasó? ¿Ese pequeño gusto por teléfono te enganchó?”

"¡No, idiota!"

La voz de Kei se transmitió sorprendentemente fuerte a través de la habitación vacía. Pero estaba bien insonorizada, y era fin de semana, por lo que había pocas posibilidades de que alguien estuviera en el área. En caso de que alguien entrara, Kei lo sabría de inmediato por el sonido electrónico que se reproduciría cuando se abriera la puerta de seguridad. Si eso sucediera, Kei planeaba colgar y dar una excusa de que había olvidado algo en la habitación.

Kei dijo: "eras bueno y me enviaste muchos mensajes de texto, así que quería decirte que, qué buen trabajo hiciste."

"Ahh, sí, sí, gracias, gracias ... ¿Dónde estás ahora? Tu voz suena un poco diferente.”

"En el trabajo."

"¿No te vas este fin de semana?"

“El estúpido director se equivocó y tuvimos que volver a filmar algo en el lugar. Olvidé acordar los gastos de viaje.

"No suena como tú en absoluto."

"Cállate."

"¿Estabas tan solo que te has estado espaciando?"

"Por supuesto no. Tú eres el que siente nostalgia y llora ".

"Sí, sí, es verdad, es verdad".

Kei vaciló frente al mezclador de sonido. "Como eres tan lamentable", dijo finalmente, "cuando regreses y tenga algo de tiempo libre, podemos salir juntos a algún lado."

"¿Oh?" Ushio mostró sorpresa en su voz. "¿Como a dónde?"

"¿Como a una tienda de ramen?"

"Solo quieres comer allí ... Bueno, está bien, cuando regrese, saldremos a una cita. Es una promesa."

"…Lo tengo."

Kei colgó con el sonido de Ushio diciendo "cita" sonando en sus oídos. Mientras se detenía para respirar hondo, oyó el ruido sordo de un rincón de la habitación. Directamente en diagonal desde donde estaba parado Kei, había varios escritorios dispuestos en un grupo juntos. Era donde habían puesto las computadoras utilizadas para los gráficos y los quirrones.

Durante varios segundos, todo se jugó en cámara lenta. Una silla se apartó del escritorio y la figura oscura de una persona salió de debajo del espacio.

"Ahh ... hola."

Con el sonido de la voz de Tatsuki, el mundo volvió a su velocidad normal, y Kei se dio cuenta de que esto no era un sueño.

"Ummm, creo que te estarás preguntando por qué estoy aquí ..."

Kei no había preguntado, pero Tatsuki habló de todos modos. “Estaba tratando de conseguir algunas entradas para conciertos. Sólo aceptan reservas por teléfono, y escuché que la red tiene una línea telefónica especial de emergencia que le da prioridad especial sobre otros teléfonos. Cuando pregunté al respecto, alguien dijo que el teléfono en la sala de control probablemente funcionaba de esa manera, ¡así que me escabullí aquí para intentarlo y realmente lo logré! ¡Estaba muy feliz de poder conseguir los boletos! Pero entonces oí que se abría la puerta y corrí a esconderme …”

Kei no interrumpió, ni asintió con la cabeza; él sólo se quedó en silencio.

“... De todos modos, pude obtener dos boletos, ¿te gustaría venir conmigo? Es un concierto de Mr.Children."

Kei permaneció en silencio mientras sus ojos recorrían lentamente la habitación.

"¿Qué estás buscando?"

"Un objeto contundente."

"¿Huh?"

"Un objeto contundente que pueda usar para matarte".

"¿Qué? ¡De ninguna manera, no quiero morir!"

"¡Cállate!" Kei explotó ante el tono juguetón en la respuesta de Tatsuki; la pólvora era una mezcla de impaciencia, arrepentimiento y vergüenza.

Kei arañó su cabello con ambas manos y gritó. Quería transformarse en un monstruo gigantesco si podía, aplastando el edificio de oficinas, Tatsuki, y todo lo que estaba debajo de sus pies. "¿Por qué tienes que ser tú?" En serio, ¿por qué tú? ¡Jod me er,molestas! Deja de seguirme y molestarme, ¿quieres? ¡Dios! ¡Si tuviera una Death Note en mi mano ahora mismo, escribiría tu nombre en ella!"

Kei gritó derrotado usando la verdadera voz que normalmente ocultaba. Cualquier posibilidad de que él pudiera inventar una excusa para hacer pasar su comportamiento como un acto murió cuando él rompió y arrojó toda razón al viento. Aunque su uso del lenguaje grosero había sido expuesto, los secretos de su vida privada no habían sido comprometidos por completo; sin embargo, se acabó el juego para Kei en el momento en que salió a la luz que estaba ocultando su verdadero yo.

Ahh, ya no me importa. También huiré a América.

Tatsuki abrió mucho los ojos y susurró: "oh, Dios mío ..." Sus ojos brillaron mientras se reía. "Oh, Dios mío, eres hilarante, Kunieda-san. Me estás matando. ¿Una Death Note, de verdad?”

No había malicia en la risa de Tatsuki, sólo diversión pura y honesta. Kei esperaba enfrentar ira y miedo, y esta reacción lo desconcertó.

"¿Qué demonios eres?" Kei frunció las cejas, todavía tambaleándose por su arrebato.

Tatsuki dijo: "¿y tú, Kunieda-san?"

Fue una respuesta comprensible.

"Soy..."

"Es un personaje que inventaste, ¿verdad? Estás presentando un acto para la gente."

A Kei no le gustó cómo todo el esfuerzo que había puesto en su imagen fue descartado como un "personaje", pero asintió a regañadientes con la cabeza.

"Wow, eso es increíble, pero ¿no es un problema? ¿No te cansas de eso?"

"Es mi propia decisión. Déjame solo."

"Sé que siempre tenemos que estar listos para lucir bien para la cámara, pero creo que este Kunieda-san es más interesante."

"No me hables como si me conocieras por estos pocos minutos."

"Hmmm, pero no son sólo estos minutos".

"... ¿Eh?"

¿Qué está balbuceando?.

“¿Sabes cómo hablé sobre el momento en que te entrevisté? Te había felicitado, pero lo ignoraste como si no fuera nada.”

"¿Así que...?"

“Había sonreído en ese momento, pero fue como, hmm, ¿tus ojos estaban realmente fríos por dentro? ... Había estado a quemarropa, así que pensé, mierda, creo que vi algo que no debería haber visto, y sentí un escalofrío en mi columna vertebral."

Sin embargo, no había escalofrío en la voz de Tatsuki, y continuó alegremente: "estaba un poco molesto por eso, pero realmente no trabajamos juntos, y todos dentro y fuera de la red nunca dijeron nada malo sobre ti. Eras amable, bueno en tu trabajo y trabajaste muy duro; una estrella que todos admiraban. Todo eso estaba bien, pero aún me preguntaba sobre el momento de la entrevista, si había imaginado cosas o no. Entonces, cuando recibí la orden de estar en el mismo programa que tú, aunque tuve un berrinche, también pensé que era una buena oportunidad para mí."

"Así que por eso me seguías molestando todo el tiempo."

"No estaba tratando de husmear para averiguar más sobre ti. Sólo quería conocerte mejor a nivel personal."

"¿Y ahora qué?" Kei se cruzó de brazos y se apoyó contra un escritorio.

"¿A qué te refieres?"

“Tus malditos instintos tenían razón. Todo esto es una imagen que quiero proyectar, ¡porque me gusta cuando soy el centro de atención! ¡Me gusta cuando soy perfecto y encantador! No estoy lastimando a nadie, ¿¡así que por qué no!?"

"Ah, sí, creo que está bien, si eso es lo que quieres hacer."

Kei casi sospechaba que Tatsuki era un extraterrestre. No parecían ser del mismo planeta.

"Por cierto, ¿con quién estabas hablando por teléfono?"

"No es asunto tuyo."

“¿Fue Tsuzuki-san?

"¿¡Qué!?"

Teniendo otro de sus secretos abierto en tan poco tiempo, Kei sintió la necesidad de matar a Tatsuki y resucitar dentro de él. "¿Qué demonios, tienes una cámara o un micrófono plantado en mí?"

"Realmente no. La mitad fue una suposición aleatoria.”

“Entonces, ¿de dónde vino la otra mitad? Sólo has conocido al chico una vez ".

"Hmm ..." Tatsuki también se cruzó de brazos y miró la pared de monitores oscuros. “¿Sabes cuando mencioné mi práctica “jugada a jugada”? Es un poco extraño mirar las cabezas de las personas todo el tiempo, pero eventualmente comienzas a notar muchas cosas diferentes. Simplemente están cruzando la calle, pero se puede saber si una persona está de buen humor o si parece que una pareja ha estado peleando. Suena un poco arrogante, pero es lo que ayudó a agudizar mis habilidades de observación. Esa noche cenamos juntos, te vi caminar al lado de Tsuzuki-san cuando salimos del restaurante.”

"Pero estábamos compartiendo un taxi porque íbamos en la misma dirección."

"Sí, pero había algo solo mirándolos a los dos desde atrás ... No estaban hablando como si estuvieran muy cerca, pero tampoco tuve la sensación de que no tenían ningún punto de contacto entre ustedes dos. Entonces eso probablemente significaba que habías hablado de antemano acerca de pretender no conocerse muy bien. Que ustedes dos compartían un secreto o algo así.”

Por fin, Kei notó el sonido de su corazón latiendo en sus oídos. La intuición de Tatsuki era correcta. También lo era Kei, odiando a Tatsuki a la vista. Fue un instinto de autoconservación. Ahora que todo estaba expuesto, tuvo que tomar medidas urgentes para protegerse, pero su cabeza estaba llena de una letanía de mierda, mierda, mierda, mierda, mierda, y no podía resolver nada en su cabeza.

¿Por qué no puedes estar aquí para ayudarme?.

"Um, ustedes dos están saliendo, ¿verdad? Así sonó su llamada telefónica."

"¿Qué? ¿Quieres convertirte en periodista o algo así?”

"¿Huh? De ninguna manera. No estoy hecho para eso."

Kei quería alabarse a sí mismo por su autocontrol. Realmente quería quitar esa estúpida sonrisa de la cara de Tatsuki.

"No soy particularmente inteligente cuando se trata de resolver las cosas. Pero supongo que se podría decir que te he estado observando durante mucho tiempo, así es como sospeché algo"

"¿No tienes nada mejor que hacer? Qué espeluznante.”

Era demasiado tarde para arrastrarse y rogarle que se callara. En cualquier caso, Kei preferiría morir antes de hacer algo así.

"¿Qué? Que malo. De hecho, me ha sorprendido bastante."

"¿Por qué demonios te sorprenderías?"

"¿Huh? ¡Porque tienes novio! ¡Y estabas siendo todo amoroso con él por teléfono!”

"¡No estaba siendo cariñoso!"

"Ahh, te estás sonrojando mucho ... ¿Tienes algún plan para terminar en un futuro cercano?"

"... Oye, ¿qué demonios estás diciendo?"

"Si no, está bien. Perseguir una historia de amor también es bastante emocionante."

"No me importa lo que te emociona."

"¡Ahh, esa es la mirada, allí mismo! También me dieron escalofríos cuando me maldijiste antes. Me da un poco de emoción que me insultes cuando generalmente sonríes tan amablemente a todos."

"En serio, ¿qué demonios estás diciendo?"

"Alguien es un poco denso, pero también me gusta esa parte de ti, Kunieda-san."

Después de desencadenar su propia explosión y enfrentarse a dos bombas adicionales en rápida sucesión, Kei ya no tenía nada que perder. Él sonrió brillantemente y puso todo su corazón en sus siguientes palabras.

"Muérete. Luego muere de nuevo en tu próxima vida.”

"Esta es la primera vez que me dicen que muera después de confesarme a alguien."

"¿Estás jugando conmigo?"

"Si me dices que juegue contigo, jugaré contigo todo lo que quieras."

“Y odio esa estúpida boca tuya. ¿Cómo demonios esperas que alguien tome tu confesión en serio después de todo? Especialmente cuando eres conocido como el maldito monstruo de reunión de Asahi TV."

"Es sólo conocer a diferentes personas de otras empresas. Sólo voy por la conversación. Pero si no te gusta, Kunieda-san, dejaré de ir."

"No me importa. No es asunto mío. No intentes usar una estúpida mentira para meterte conmigo. No es gracioso, idiota."

“¿Te parezco poco confiable?” Tatsuki hizo un puchero triste, su expresión transformándose en la seria que había mostrado en el puente peatonal. "Te dije que hablaba en serio ese día que tuve mi entrevista contigo."

Kei mantuvo la boca cerrada y hundió los dedos en sus brazos.

"Fue la primera vez que conocí a alguien que no podía sacar de mi mente. Quería conocerte mejor, acercarme a ti. Pero eres un hombre, y realmente no sabía cómo funcionaría entre nosotros, pero después de escuchar tu conversación telefónica, todas mis dudas desaparecieron. Aunque estoy un poco molesto por Tsuzuki-san, pero si puedes aceptarlo, creo que tú también deberías poder aceptarme a mí."

"¡No funciona así!"

"¿Huh? ¿Por qué no? ... Oh, espera, lo siento."

La alarma del teléfono celular de Tatsuki había comenzado a sonar.

"Olvidé la sesión de grabación para un trabajo de narración que tengo a las dos en punto. Tengo que irme, así que disculpa."

Tatsuki salió rápidamente de la habitación sin terminar su conversación (no es que Kei tuviera intenciones de resolver las cosas con él).

Kei finalmente descruzó los brazos y contó con los dedos, doblando cada uno lentamente. Uh, mi tapadera se rompió, mi relación con Ushio se rompió, el maldito idiota se confesó ..

Kei miró su mano que casi formaba un puño. Luego miró hacia el techo de la sala de control vacía y gritó a todo pulmón, "... ¿¡Qué coño!?"

"¿Qué carajo? ¿¡Que puedo hacer!? ¡No hay forma de que pueda arreglar esto!"

Kei quería llamar a Ushio lo antes posible, pero dado el accidente que había sucedido antes, no quería que nadie más se enterara. Esperó hasta que regresó a casa, comprobó que la puerta del balcón estaba cerrada, por si acaso, y llamó a Ushio desde su teléfono celular.

"¿Qué pasa?"

"Todo reventó." Era lo único que Kei podía decir sobre la situación, pero había una parte de él que estaba terriblemente tranquila bajo la confusión y la agitación.

"¿Huh? ¿Qué quieres decir?"

“Mi tapadera, todo. Es inútil Voy a sacarlo de aquí y unirme a ti. Viviré allí y comeré una dieta de hamburguesas y alimentos fritos en aceite ".

"No creo que se puedan freír cosas que no sean petróleo. De todos modos, cálmate y cuéntame qué pasó.”

"No te enojes."

"Todavía no he escuchado qué es, ¿cómo se supone que debo saber cómo reaccionar? ... Pero bueno, no me enojaré, así que dime."

Kei le contó a Ushio todo lo que había sucedido con la llamada telefónica en el trabajo antes, incluida la confesión de Tatsuki.

Ushio hizo una pausa en silencio por un momento y preguntó: "¿qué vas a hacer?" Parecía que la historia no le afectaba por completo.

¿Que demonios? ¿Por qué no lo estás tratando como si fuera tu problema también?.

“¿Qué demonios puedo hacer? ¡Eso es lo que quiero saber!"

Ushio permaneció calmado y preguntó: "¿cómo te sientes acerca de él?"

"¿Qué?"

¿Sigue celoso?.

Pero Kei no pudo sonreír al respecto; apretó su teléfono celular y preguntó: "¿por qué sigues preguntando? No siento nada por él. ¿No puedes decirlo? "

"No, no puedo decirlo, en realidad. Te estoy preguntando en serio."

¿Qué demonios estaba diciendo?.

Era su propia casa, pero Kei no podía decidir dónde sentarse; se quedó quieto mientras escuchaba la voz de Ushio.

"Te has estado quejando de Minagawa casi todos los días. Pero si realmente odiaras a alguien, ¿realmente enumerarías cada pequeña cosa que hicieron, incluso las cosas que realmente eran buenas? La noche que lo conocí, lo entendí. Nunca antes te habías encontrado con alguien que pudiera defenderse de todos los encantos de Kunieda Kei, y fue persistente al respecto. Te sacudió hasta el punto de que no podías ignorarlo o sacarlo de tu mente."

Kei no pudo evitarlo. Cada vez que había una invitación molesta con la que no quería tratar, solo sonreía disculpándose, y la gente recibía el mensaje y retrocedía. Solo Tatsuki se negó a captar la indirecta y continuó metiéndose debajo de su piel.

"... No seas estúpido." Era lo único que Kei podía decir. Se suponía que debía negar todos los puntos que Ushio había hecho, decirle que estaba equivocado, pero Kei no pudo encontrar ninguna palabra lo suficientemente convincente como para decirle a alguien que no podía ver o tocar en ese momento. Ushio siempre había entendido a Kei, entonces, ¿cómo podría Kei tratar de disputar algo de lo que nunca se había dado cuenta?

“Pensé en lo que podría hacer para manejar la situación. Sabía que le gustabas a Minagawa, era obvio, pero no podía prohibirte hablar de él. Simplemente te volverías más inquieto. Y no podría decirte que te mantengas alejado de él ... Hola, Kei."

Kei se preparó en defensa cuando escuchó a Ushio gritar su nombre. "¿Qué?"

“Te dije que me gustas, incluidas tus dos personalidades. Es interesante y me gustas como eres. Eso no ha cambiado. ¿Pero no se aplica lo mismo para él? Si es así, ¿qué harás?”

Era un secreto que fuera de sus padres, sólo Ushio lo había sabido. Pero ahora se había filtrado.

"Dijiste que no hay nadie a quien puedas mostrar este lado tuyo. Y honestamente, no tomé las palabras demasiado en serio, pero ahora que hemos llegado a esto, te está mirando igual que yo."

"Te dije que lo rechacé."

"¿Retrocedió?"

"…No lo sé."

"¿No lo sabes?" Ushio se rió casi con desprecio. Kei nunca había escuchado a Ushio sonar así antes. "Entonces déjame hacerte una pregunta: ¿qué harías si te dijera que se quedaría callado si salieras con él?"

"Huh, no pensé en eso."

Fue un resbalón accidental de la lengua. Kei simplemente quería decir que no pensaba en la posibilidad de que pudiera haber sido chantajeado y que estaba contento de que Tatsuki no hubiera intentado hacer algo tan sombrío. Sin embargo, las palabras parecían enfurecer a Ushio.

"¿Qué quieres decir con que no pensaste en eso? ¿No me digas que quieres sugerírselo para salvarte?"

"No, eso no es lo que quise decir."

“Puedes ser realmente estúpido a veces. Parr lo listo que eres, eres increíblemente tonto."

"Dijiste que no te enojarías ..."

“¡Este es un asunto completamente diferente! Hay un límite en lo despiadado que puedes ser ..."

"¿Y tú?" Kei no pudo evitar discutir. "Es tu culpa que me hayas enviado un mensaje de texto."

"Tú fuiste quien me dijo que te enviara un mensaje de texto."

“¡Ahhh, cállate! ¡Me estás poniendo más nervioso que no se me ocurre nada para arreglar esto! ¡Maldita sea, llamarte fue inútil! ¡Lo que sea, no me importa si no vuelves!"

En el momento en que las palabras salieron de su boca, Kei supo que había ido demasiado lejos. Y en el mismo momento, Ushio respondió fríamente: "bien, no lo haré".

El teléfono celular quedó en silencio, y colgaba de la mano de Kei tan pesado como el plomo. Ni siquiera tenía la energía para levantar la voz.

Sin corazón., Ushio había dicho. Eso era cierto. No aprovechó la oportunidad para decirle a Ushio que lo amaba, que no sentía nada por Tatsuki.

Pero al mismo tiempo, Kei quería escuchar que Ushio también lo amaba, que no debería molestarse en darle a Tatsuki la hora del día. Ambos eran demasiado tercos, se lastimaban mutuamente en el proceso, y su corazón simplemente le dolía.